Ser una madre adolescente no es una tarea fácil en absoluto. Sus hijos quieren tomar decisiones de adultos, pero todavía piensan como niños y usted se vuelve loco todo el tiempo. ¿Qué tal si tratas de calmarte un poco? Sí, lo sé, probablemente estés pensando algo como "Sí, cálmate, mi hijo me está volviendo loco", pero tu hijo no es diferente de cualquier otro adolescente. Abrace estos 7 consejos y aprenda a entender a su hijo.
1. Intenta entender
¿Recuerdas cómo te sentiste mientras estabas embarazada? No tomaste muchas buenas decisiones, ¿verdad? Y en aquel entonces, estabas completamente de acuerdo con decir que hablaban las hormonas. Bueno, adivina qué: las hormonas de tu adolescente también están completamente fuera de servicio.
El cuerpo de un niño o niña adolescente es básicamente un conjunto de hormonas en dos piernas. No puedes esperar que algo así sea muy cuerdo. Su adolescente probablemente hará y dirá algunas cosas que no le gustarán en absoluto. Recuerde que esos días no durarán para siempre, y haga todo lo posible por comprender las decisiones que toma su hijo adolescente.
2. Recuerda tus días de adolescencia
Ve al baño y mírate en un espejo. Ahora, no seas mentiroso y honestamente recuerda cuántos problemas le diste a tus propios padres cuando eras adolescente. No, no eras perfecto, no importa cuánto te gustaría pensar eso. Ninguno de nosotros fue. Y todos nosotros fuimos prácticamente una pesadilla durante nuestros días de adolescencia. No se sorprenda de reconocer muchas de sus propias decisiones y acciones en su hijo: la sangre es más espesa que el agua.
3. Edúcate
Si realmente quieres entender a tu hijo adolescente, debes ponerte al día con la tarea. No es todo lo mismo que cuando eras niño. Los tiempos están cambiando y los adolescentes también están cambiando.
Aunque muchos padres no quieren aceptar eso, los niños crecen mucho más rápido en estos días. Su hijo podría entrar en la pubertad a los 8 años de edad. Necesitas estar preparado para esto. Hable con otras madres, navegue por Internet o incluso tome una clase. Recuerda que no eres un mal padre si estás pidiendo ayuda. Por el contrario, usted es un padre que se preocupa lo suficiente como para pedir ayuda.
4. Calmarse
Casi todo lo que ha hecho su adolescente le parece mucho peor de lo que realmente es. Entonces, ¿qué pasa si su hija se ha perforado el ombligo o si su hijo se ha teñido el cabello de verde? No es el fin del mundo. ¡Así que deja de entrar en pánico y cálmate un poco!
En lugar de perderlo por completo y comenzar a gritarle a su hijo sobre algo que ha hecho, intente hablar con él. Explíquele a su hija que los piercings conllevan el riesgo de infecciones, especialmente si se realizan en salones donde una niña menor de edad no necesita el consentimiento de sus padres para hacerse un piercing. Explíquele a su hijo que el cabello verde no es realmente la mejor manera de hacerlo diferente de otros niños. Podría ser un gran músico en su lugar.
5. Tome precauciones
Una de las mayores preocupaciones de un padre adolescente es que su hijo pronto comenzará a tener relaciones sexuales. No es agradable pensar en eso, pero es inevitable. Después de todo, todos los adolescentes sanos tienen relaciones sexuales, tú también lo tuviste, ¿recuerdas?
Reúna fuerzas para hablar con su hijo sobre el sexo. Hágales saber que pueden hablar con usted al respecto. No importa cuánto le gustaría, no puede esperar que la escuela le enseñe a su hijo sobre esto.
Asegúrese de explicarle a su adolescente que debe pensar en el embarazo no planificado y en las ETS. Lleve a su hija a un ginecólogo y le recetarán un método anticonceptivo. Recuerde, no importa cuán dañino cree que son las píldoras anticonceptivas: un aborto es mucho más dañino.
Hágale entender que todavía necesita usar condones si quiere tener relaciones sexuales, porque son la única anticoncepción que protege contra las ETS. Ponga esto en la cabeza de su hijo también.
6. Respeta su privacidad e independencia
Debe comprender que su adolescente ya no es su niño o niña. Los adolescentes quieren ser independientes y a la mayoría de ellos les gustaría hacer una cierta distancia entre ellos y sus padres. La forma menos dolorosa es simplemente aceptar esto. Es una parte normal y saludable del crecimiento y no debería ser de otra manera.
Respeta la privacidad de tu hijo. Es posible que ya no quieran hablar contigo sobre todo. No los presione, solo hágales saber que aún pueden hablar con usted sobre cualquier cosa. No irrumpir en sus habitaciones, no registrar sus maletas y, bajo ninguna circunstancia, leer sus diarios. Debe hacer todo lo posible para establecer una relación de confianza entre usted y su hijo. Si desea que confíen en usted, también debe poder confiar en ellos.
7. Deja que cometan errores
A todos los padres les encantaría proteger a sus hijos de cometer errores, pero sinceramente, esto no es posible. Su hijo está obligado a cometer errores, y usted debe dejar que cometan algunos de ellos.
Por supuesto, esto no significa que deba dejar que su hijo adolescente corra sin tener idea de la vida, pero tampoco significa que pueda monitorear cada uno de sus movimientos. Haga su trabajo: advierta a su hijo adolescente sobre todo lo que considere importante y ofrézcale consejos. Después de todo, su hijo necesita crecer y convertirse en una persona independiente. Nadie puede hacer eso con su madre flotando sobre su cabeza cada segundo.
En conclusión, simplemente necesitas calmarte un poco. No eres el primero o el último padre en pasar por eso. Solo trata de entender a tu adolescente. Siga estos consejos y todo podría ser un poco más fácil.
Siéntase libre de compartir sus propios consejos en los comentarios, las madres de todo el país necesitan toda la ayuda que puedan obtener.