Obtenga más información sobre los muchos beneficios del té verde y cómo prepararlo adecuadamente.
El té verde se obtiene de las hojas de una planta conocida como Camellia sinensis, cuyo consumo tiene orígenes en China y Japón, hace más de 3000 años. Los antiguos curanderos chinos escribieron sobre los beneficios de esta planta a principios del siglo II a.c., mientras que los exploradores portugueses que llegaron a Japón en el siglo XVI dijeron que habían usado este té para curar dolor de cabeza, dolor de estómago, fiebre y dolores articulares. Pero durante muchos siglos, ninguna otra cultura, excepto las del Medio Oriente, le ha dado tanta importancia a esta bebida.
Fue hace solo unos años cuando diferentes investigaciones médicas han demostrado científicamente todos sus beneficios. Ahora se cultiva y produce en todo el mundo y, además del agua, es la bebida más consumida en el planeta. También es una de las hierbas más complejas utilizadas en la industria farmacéutica.
Las sustancias presentes en el té verde conocidas como catequinas son antioxidantes fuertes y eficientes que son muchas veces más potentes que la vitamina E y la vitamina C. El té verde también contiene cafeína, teobromina (un excitante) y L-teanina (un aminoácido único del té verde conocido por su efecto de relajación).
Té Verde y Cáncer
Uno de los aspectos más interesantes del té verde radica en sus propiedades anticancerígenas. El consumo de té verde en Japón, mucho mayor que en todos los demás países, ha reducido considerablemente la incidencia de cáncer tanto en hombres como en mujeres. Particularmente bajo parece ser también el número de casos de cáncer de pulmón en Japón. Sin embargo, se ha demostrado científicamente que el té verde tiene un efecto protector contra la cancerogénesis, si se consume desde el principio.
Té verde y sus efectos antienvejecimiento
Los efectos antienvejecimiento del té verde se deben a su alto contenido de flavonoides, que son muy fuertes para proteger el corazón y combatir los radicales libres, responsables del envejecimiento de la piel. Refuerza el sistema inmunitario y ralentiza el proceso de envejecimiento. Los científicos ahora están trabajando en una catequina particular de té verde, llamada EGCG (galato de epigalocatequina). Parece que EGCG tiene capacidades antioxidantes muy fuertes y que ayuda a reactivar las células de la piel que mueren.
Té Verde y Dieta
El té verde regula su metabolismo, mejora la flora intestinal (es un antibacteriano muy poderoso) y ayuda a perder peso. Reduce la absorción de azúcar, mientras que sus polifenoles hacen que su cuerpo produzca calor que quema grasa.
Otros beneficios
Los beneficios del té verde son múltiples y es difícil mencionarlos todos a la vez. Se ha demostrado que garantiza el buen funcionamiento del hígado, disminuye la presión arterial, alivia los dolores de cabeza y protege contra las infecciones digestivas y respiratorias. También está indicado para tratar la osteoporosis y acelera todos los procesos de curación. Una nueva investigación sugiere que puede ser útil para reducir la enfermedad periodontal y para preservar los dientes.
Cómo hacer té verde correctamente
Para mantener y no destruir los ingredientes activos del té verde, debe hervir el agua y luego dejar que se enfríe a 80 ° C (que es solo hirviendo), vierta sobre las hojas de té, cubra e infunda durante 3 minutos.
No olvide que el té verde contiene una cantidad moderada de cafeína y puede causar nerviosismo y ansiedad. La cantidad recomendada de té verde es de dos a tres tazas por día.
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